Durante el mes de agosto se sacrificaron en el rastro municipal 2,316 animales, de los cuales fueron 1,726 bovinos, 220 equinos y 370 cerdos, dio a conocer Rubén Eduardo Delgadillo Ramírez, titular de la Dirección de Industrialización Agropecuaria.
“Los animales llegan 24 horas antes de su sacrificio, en los corrales se les provee agua y no alimento, ya que tienen que tener un ayuno antes de entrar al sacrificio. Por parte del área sanitaria checamos sus movimientos para constatar que vengan sin lesiones”, explicó.
Destacó que durante el proceso de sacrificio y antes de que el animal salga del rastro, son inspeccionadas las cabezas, vísceras y canal en general por dos médicos veterinarios y un técnico para determinar si el producto es apto para consumo humano.
“Somos constantemente sometidos a inspección y supervisión de los procesos por parte de personal de la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (COESPRIS), el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria y también por médicos del Comité de Fomento Pecuario del Estado, quienes verifican que se trabaje bajo las normas establecidas”, explicó el funcionario.
Delgadillo Ramírez comentó que en el rastro municipal reciben a bovinos, equinos y porcinos; hay cuatro días en los cuales se lleva a cabo el sacrificio, los lunes, miércoles, jueves y viernes.
“Los días lunes, miércoles y viernes”, explicó, “atendemos a los bovinos, entre 200 a 250 por día, mientras que el jueves llevamos a cabo el sacrificio de porcinos y equinos”.
El director del rastro informó que los costos actuales por servicio de matanza en bovinos es de 579.24 pesos; en equinos, 439.73 y en cerdos 300.21 pesos, lo que dejó en el último mes una recaudación 1,415,728 pesos.